Tal vez esa la mejor palabra para definir la performance que la Babel Orkesta lleva a cabo todos los jueves en el Konex.
Poco después de las 20 horas con una puntualidad llamativa y cuando todavía el sol sigue iluminando el patio de "la ciudad cultural" los Babel hacen su aparición en una particular carroza que los deposita al borde de las escaleras que están en el centro del patio para arrancar su performance.
Cinco músicos: tuba, trombón, saxo, flautas, percusión, acordeón, guitarra y banjo.
Canciones instrumentales que suenan gitanas, que suenan a paso doble, a vals, a cumbia, a una mezcla de ritmos confusa que te hacen mover la patita, que te invitan a saltar, a bailar, a seguir el ritmo con la cabeza.
Tres actores que interpretan una pequeña historia de amor y celos, que sirve como excusa para terminar invitando a la audiencia a levantarse, a que pierda la vergüenza y se olvide que aún es de día y se saque las ganas de moverse.
Señoras de sesenta y picos de años sentadas risueñas aplauden, tal vez recordando sus años mosos allá lejos hace tiempo.
Chicas malabaristas de ropas coloridas y peinados punkies agitan desde un rincón, a su manera.
Chicos de rastas abrazan a turistas españolas invitándolas a sumarse a un trencito cuasi cumpleañero.
Parejas comparten una cerveza mientras se menean al son de las melodías.
Señores que de lunes a viernes entre las 9 y las 18 visten traje, tratan a todo el mundo de "usted" y no muestran su sonrisa por nada del mundo bailan como extasiados sin importarles ni un poco lo que pueda pensar el resto.
Niños de 8, 9, 10 años abandonados por sus padres que prefirieron danzar, corretean entre los bailarines disfrutando de la libertad.
Diversión, alegría, igualdad. Todos unidos por el amor a la música, sin fijarse edad, religión, nacionalidades ni sexo: socialismo puro en el corazón de la ciudad de Buenos Aires.
L'ennui est contre-révolutionnaire grafiteaban unos franceses en el 68, Babel Orkesta no se queda atrás y pone su granito de arena para lograr la tan mentada revolución.
Viva!.
En una pequeña muestra de solidaridad, sino estan seguros si pueden ir o no saben si llegaran a tiempo, por favor no participen, dejenle el lugar a alguna otra persona que si lo pueda disfrutar.
2 comentarios:
ideal para pegarle una pizza al final.
=)
Yo una vuelta lo crucé al tipo del acordeón en el subte... toca bastante bien y me quedé buscando a ver si encontraba algo de estos locos...
Me quedó la espina de tener que bajarme y no darle unas moneditas...
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