Con mis amigos en el concierto de metal duro por sentimiento

Tano Romano 25 años en el Teatro de Flores 13.03.10
fotos Eze

MEDIADOS DE MAYO DE 2009
Era ya de noche, habíamos estado charlando con el Tano Romano y su familia un par de horas, la entrevista había sido muy buena y nos disponíamos a volver a nuestras casas tomando algún transporte que nos deje en capital federal, para después tomar otro que nos deje en nuestros hogares. Aquella noche, tanto Antonio como Roxana, su esposa y madre de sus hijos, nos acompañaron las cuadras que nos separaban de la parada del colectivo. En algún momento de esas cuadras Miriam queda delante mío charlando con Roxana y yo quedo mas atrás hablando con Romano. Ahí Él volvió sobre esa idea loca que le daba vueltas por la cabeza: festejar sus 25 años con la música para que las nuevas generaciones (como la de su hijo) pudieran escuchar en vivo las canciones que el junto con otra gente compuso en el pasado y que marcaron un ante y un después en la historia del heavy y hasta de la música nacional. El Tano soñaba como un niño, se le abrían sus ojitos con alegría y contaba como la gente cada vez que lo ve sobre las tablas le pide temas de Hermética, de Malón, para recordar viejos momentos felices que tienen ahí guardados en su memoria. Me cuenta como padres se le acercan con sus hijos y le dicen que los hicieron crecer escuchando sus canciones, nada de patito feo, nada de Casi ángeles, ni siquiera María Elena Walsh, hay una generación de niños con padres Heavys que en sus cunas escuchaban “Vientos de poder” y es maravilloso. Para todos ellos y para todos nosotros que queríamos volver a escuchar esa enorme cantidad de canciones que de alguna forma u otra nos cambiaron la vida, era que tenia ese proyecto, finalmente llevado a cabo.


MARTES 9 DE MARZO
La casa de Eddi Walker, bajista de Lethal y de Razones Concientes (la banda actual del Tano) estaba literalmente copada de gente. En una habitación con colchones en las paredes para contener el sonido y evitar quejas de los vecinos la banda ensayaba las 25 canciones que formarían parte de la lista del 13 de marzo. Todo ante la mirada de amigos, músicos, fanáticos que convertían en esa habitación en un hervidero, en la que el que entraba, salía sudando y con los oídos pitando por el volumen de la banda. Los que acompañarían a Antonio como banda base, digamos, serian el antes mencionado Eddi Walker (uno de los pocos músico que vi que disfruta tanto un ensayo como estar sobre el escenario, se mueve, agita la cabeza, disfruta cada segundo en que tiene el instrumento en la mano, es impresionante), Pablo, un baterista del carajo poniéndole un poco de sangre joven a la cosa y Walter Meza, el carismático vocalista de Horcas que se terminó aprendiendo como 15 temas en pocos días para hacerle el aguante al Tano. Afuera la camaderia metalera estaba presente, entre cervezas y vino, uno podía escuchar historias de años de ruta de viejos músicos de la movida que estaban ahí esperando su turno para entrar a practicar la canción que les tocaría interpretar en el recital, como así también de amigos que fueron plomos de Hermética y Malón que recordaban viejas aventuras juveniles junto a los grupos. Allí alguien me dijo que el Tano había llamado a TODOS para que participen de este show, pero ya se sabia que había uno que seguro no iba a hacerse presente porque al parecer aun sigue manteniendo los viejos rencores del pasado, una lástima.

 


SABADO 13 DE MARZO
A las 7 de la tarde la cola para entrar al Teatro de flores cubría casi una cuadra, 100 metros tapados de remeras negras, en su mayoría con la H de Hermética y el logo de Malón, por lo general gastado, casi invisible de tantas batallas y sudor ajeno en viejos pogos juveniles. Las caras de nostalgia estaban presentes en todos los concurrentes, algunos niños caminaban con sus padres maravillados de por fin poder ver en escena a ese tipo de la guitarrita que su viejo no se cansa de elogiar cada vez que escucha una de sus canciones en el viejo radiograbador doble cassetera de la cocina de casa. En el backstage los nervios no se notaban tanto como en la calle, los músicos charlaban animados con algun vaso de fernet en la mano, tirando nombres de viejos personajes ya casi olvidados y las carcajadas y la buena onda general ilusionaba con un gran concierto.
El Tano Romano es historia pura, es un emblema del heavy metal y la música Argentina en general. Sin ningún tipo de dudas esta en un podio de notables que no muchos alcanzaron y pocos alcanzaran alguna vez dentro de lo que es la música pesada nacional. Digan lo que digan, si en el diccionario figurara el término “metal argento”, Hermética seria el primer ejemplo dado. Pero no es solo esto, algo difícil de lograr con el tiempo y sobre todo en un ambiente tan extraño como el musical es la coherencia, la buena leche, la humildad y la perseverancia y Antonio Romano es un tipo que tiene estas virtudes y varias más, por eso se merecía un recital como este.
 


Cuando se apagan las luces y empieza la introducción del show con el conocido Tano solo que tocaba en Hermética las mil y pico de personas que hacían estallar el Teatro de Flores enloquecieron. Y la memoria empieza a trabajar y a emocionarte con el correr de las canciones: masa anestesiada, cráneo candente, malon mestizo, evitando el ablande, soy de la esquina, vientos de poder, buscando razón, tu eres su seguridad y sigue y sigue y te das cuenta que te las sabes todas, que en algún lugar de tu cabeza le quedaron guardadas aquellas letras que te cansaste de repetir en los 90s y te salen por la boca a los gritos y no te importa que tu cuerpo empiece a transpirar, dejas que se mueva, que se mezcle en la manada que agita sus cabezas y disfruta como si fuera lo último que van a hacer en su vida y vas de acá para allá y disfrutas como aquel adolescente que a los 16 se vestía de negro y se dejaba el pelo largo para parecerse a esos tipos de los posters de la Madhouse que tenias pegados en la pared de tu vieja habitación. Saltas, te emocionas, se te humedecen los ojos cuando escuchas lo del tormento del vino artificial y la atmósfera parrillera, y lo ves al Tano sonreír desde arriba y todo cuadra como en una extraña película.
Los invitados fueron pasando, imposible nombrarlos a todos, pero entre ellos estuvieron el Pato Strunz, Willy Caballero, gente de Tren Loco, de Lethal, de Nepal, de Imperio y muchísimos mas que se subieron a hacerle la segunda y a reconocer en muchos casos que las viejas bandas del homenajeado cambiaron sus vidas e hicieron que quisieran ser músicos de metal. Tal vez hubiera sido el broche de oro si el 75% Malón se hubiera juntado sobre las tablas, pero a O´Connor lo seguimos esperando, porque prometió y prometió, pero nunca apareció, aunque eso no opaco la fiesta ni mucho menos, la verdadera figura de la noche tenia colgada la vieja guitarra color madera y nos dejó empachadísimos. Fueron casi 2 horas de recuerdo que valieron la pena, y quedarán en el recuerdo de muchos de nosotros. Veinticinco años con la música no se cumplen todos los días y la verdad que fue un placer, todo muy rico Sr. Romano, que se repita pronto.





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Queremos agradecer especialmente a Roxana y al Tano mismo que nos permitieron sin problema alguno colar nuestra camarita en la intimidad de este show, tanto en el ensayo como tras bambalinas.

5 comentarios:

Unknown dijo...

se me piantó el lagrimón! si hab´ran sido buenso tiempos los noventa (en lo musical, porque otro vez m*nem ni en pedo). Lamentablemente tenía 7 años cuando tocó H en Mza. Agunate el metal, larga vida al Tano carajo!


NO MURIÓ... LA H NO MURIÓ... LA H NO MURIÓ!!!

KuRcO dijo...

Te leia enumerar los temas y de a poco se me iba poniendo la piel de gallina, los pelos de punta. Que recuerdos. Para Hermetica yo era chico aun, pero la separacion, Malon, Almafuerte...
Me recorde volviendo desde cemento hasta esmeralda y lavalle a esperar el 111 (que hijo de puta, como se hacia esperar ese colectivo en el '97!!)...
Ni que hablar de Cemento y el ambiente asfixiante que tanto amaba en esa epoca, porque si, hasta ese hacinamiento me trae recuerdos hermosos.

Druida del Sur dijo...

Estoy seguro de que estos metaleros 30 anieros o 40 rentones se olvidaran
del fas--is*mo que te da una vida de clase media rutinaria

Torkaerius dijo...

me gustó la nota. saludos!

Mentaltrip dijo...

Gracias por todo tano¡¡¡ ajjaja